Estuve en Chiang Khong durante una ruta en moto por el Triángulo de Oro. Tras una larga jornada que se inició en Chiang Rai, fue mi primera parada. Aproveché para pasar la noche antes de retomar el camino al día siguiente.
Chiang Khong es una pequeña aldea que suele recibir visitantes de paso que se dirigen a la ciudad de Huay Xai, en Laos, al otro lado del río Mekong. Para tratarse de una ciudad fronteriza, el ambiente es realmente agradable, a pesar de que no tiene ningún atractivo turístico en particular.
Si te gusta el turismo deportivo, al pasar por Chiang Khong puedes visitar el Hub Bicycle Museum, creado por Alan Bate, un inglés que batió un récord en 2012: la vuelta al mundo en bicicleta más rápida de la historia. La entrada es gratuita. También interesante desde una perspectiva deportiva, un poco más al norte del pueblo se encuentra la cascada de Huai Meng. El camino por el que se accede a ella no está mu bien conservado y la vegetación invade algunos tramos, pero esta cascada situada en mitad de la selva es realmente hermosa.
Chiang Khong, en mi opinión, no tiene demasiado interés. Sin embargo, merece la pena visitar sus alrededores. Si te alquilas un escúter, podrás visitar pueblos Hmong y Thai Lue, dos etnias del norte de Tailandia. Como la zona es poco turística, los habitantes locales son más acogedores y se alegran de conocer a los viajeros. Razón de más para parar allí.
Si optas por un hotel junto al río, te dormirás arrullado por la música de la otra orilla, la de Laos. Aficionados al karaoke, no dudan en subir el volumen los fines de semana.
Muy cerca del Triángulo de Oro, Chiang Khong es el campamento base ideal para visitar este sitio turístico durante un viaje a Tailandia.