Atravesé esta península viniendo de Melbourne, y no puedo decir que todas las ciudades que encontrase a mi paso me resultaran interesantes. Algunas como Frankston pueden parecer incluso lúgubres. Además, están todas orientadas hacia la bahía, bastante aburrida para mi gusto, sin mareas, con playas insignificantes y sucias.
El principal interés de la península de Mornington reside, creo, en su costa, en la vertiente sur que mira al océano, lugar donde el litoral es magnífico y de una fiereza salvaje, con aguas generalmente agitadas y arrecifes que componen formas surrealistas.
También me agradó ir en bicicleta hasta la punta de la península, el fuerte de Nepean, que ofrece un punto de vista inigualable sobre la desembocadura de la bahía. En definitiva, un lugar agradable, pero que no me parece de visita obligada en un viaje por Australia.
La península de Mornington no resulta, a mi modo de ver, de visita obligada durante un viaje por Australia, pero puede hacerse una excursión a ella desde Melbourne. Visítala después de pasar por la Great Ocean Road, los Montes Grampianos o la Isla Phillip.
A través de la ruta que bordea la península podrás ver bonitas villas situadas al borde del mar, residencias de verano para los habitantes de Melbourne.
La ciudad de Mornington no tiene nada de interesante salvo quizá su espigón, sus veleros y gaviotas... Mejor dirígete a Point Nepean, principal atracción de la península de Mornington. En tren turístico o a pie (según las ganas) llegarás hasta un fuerte construido sobre la franja de tierra que cierra la bahía. Una visita interesante con túneles, cañones y fortificaciones, donde pasar un momento entretenido con amigos, viendo excelentes paisajes.