Tras un mes en solitario por las carreteras andinas, me encuentro con una amiga francesa que se ha instalado hace poco en La Paz con su novio boliviano. ¿Hay alguna opción mejor para descubrir una ciudad que con alguien que vive allí?
Paseamos por el centro de la ciudad, haciendo escala en la turística, pero no por ello menos agradable, calle Linares que alberga el famoso mercado de las brujas, donde abundan los talismanes de todo tipo y sobre todo los fetos de llama que, enterrados bajo los cimientos de las casas nuevas, son considerados como amuletos...
También me lleva al barrio chic de Sopocachi, mucho más tranquilo y habitado por las clases pudientes y expatriados de todo tipo. Bonitas casas y bellas vistas a las montañas que rodean la ciudad desde el parque Montículo.
A mí que me encantan los mercado, voy sola hasta el barrio de El Alto, que como índica su nombre es el barrio más alto de la ciudad, ¡a 4.000 metros de altitud! No está especialmente aconsejado, sin embargo yo no tengo ningún problema, y es verdad que soy la única turista... Allí no encontrarás recuerdos (a no ser que quieras volver con neumáticos o todas piezas de coche), ¡pero fui sobre todo por el ambiente y para disfrutar de la espectacular vista del centro de la ciudad y de las montañas!
Por la noche, con un amigo, fuimos a ver un partido de fútbol de un torneo nacional boliviano en el gran estadio olímpico Hernando Siles. ¡Ya no recuerdo el nombre del equipo ganador que recuerdo que era el equipo que nosotros apoyábamos! Pero no pasa nada, personalmente, sólo fui por el ambiente del estadio...