Visitar Estambul
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Totalmente imprescindible. Es una ciudad sorprendente, pero, sobre todo, una introducción perfecta a Turquía. Esta ciudad es el vivo reflejo del país, mitad oriental y mitad occidental.
Tengo un recuerdo precioso de las vistas del atardecer desde el puente que separa la ciudad en dos, donde van a instalarse decenas de pescadores. Es un espectáculo magnífico verles, caña en mano, mientras Estambul va tomando un color anaranjado.
Antaño Bizancio, después Constantinopla y ahora Estambul, esta ciudad hace frontera entre dos mundos. A una orilla Europa, a otra Asia. Sus numerosos monumentos son la evidencia de la historia larga y rica de esta ciudad tan cosmopolita.
Para disfrutar de un momento de magia y hechizo, te aconsejo pasar de noche por las arcadas de la Mezquita Azul. La llamada a la oración se hace eco por toda la ciudad y van llegando los fieles. Es como en un cuento.
Local Hero = héroe local
Better Trips = un mejor viaje
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