Los muchos volcanes de Costa Rica son una característica típica de este pequeño país. Si te gustan el senderismo y los paisajes, no dudes en ascender a uno de los dos. En el valle central del país, visita dos volcanes que aún siguen activos: Poás e Irazú.
Elegir Costa Rica como destino para pasar una luna de miel es fomentar el turismo sostenible en un país que es consciente de todas las ventajas naturales que posee, así como concienciar sobre lo útil que puede llegar a ser proteger lugares tan mágicos como los que tiene el país. Una razón de más para disfrutar al máximo de este viaje.
Costa Rica obtiene la independencia en 1821, tras haber sido colonizada por los españoles. El desarrollo económico del país se basa en las exportaciones, y su situación política es conocida por ser una de las más estables de Centroamérica.