Desde que se ha facilitado el acceso a la ciudad, Pokhara se ha convertido en una etapa importante del turismo en Nepal.
Cuando yo estuve aquí, me gustó mucho el ambiente de tranquilidad que había. Y por si fuera poco, es una ciudad muy bonita que se encuentra en un entorno inmejorable. Por la mañana, las montañas se reflejan en las aguas del lago. Una imagen espectacular. Y, a lo lejos, las vistas a los Annapurnas son algo prodigioso. Estas gigantescas cumbres nevadas y puntiagudas atraen a un gran número de fanáticos del trekking. Pokhara es la base ideal desde la que organizar una excursión a la montaña, y las hay para todos los niveles. Todos podrán disfrutar del camino: desde el alpinista más experimentado hasta el caminante más novel. Te aconsejo que te decantes por el sendero que empieza en el otro lado del lago y que llega hasta la cumbre de la colina. Es un recorrido sin dificultades. Desde lo más alto, las vistas a las montañas y al lago son todo un deleite. Y si no te apetece deshacer el camino andado, siempre puedes cruzar el lago en barco para volver a casa.
Pokhara cuenta con un sinfín de actividades para deportistas. Podrás probar desde los clásicos recorridos para hacer trekking, hasta bicicletas de montaña, pero también podrás practicar deportes menos convencionales, como el vuelo en ultraligero o el parapente. También tienes la opción de hacer parapente con halcones. Es bastante caro, pero seguro que es una experiencia que no olvidarás jamás.
*Tras los duros seísmos que golpearon a Nepal en abril y mayo de 2015, el país se está reconstruyendo poco a poco. Este artículo se escribió antes de que tuviera lugar la desafortunada catástrofe.
Pokhara es una ciudad de unos 250 000 habitantes que está ubicada en la orilla oriental del lago Phewa, el segundo lago más grande de Nepal. La parte turística de la ciudad está situada justamente en esta orilla, en la que el ayuntamiento ha construido un dique para frenar las inundaciones. A lo largo de la gran calle, que constituye el «centro» de la zona turística, hay un sinfín de tiendas de todo tipo, de bares y restaurantes y de hoteles. El ambiente que se respira es bastante jipioso, pero se está bien.
Las afueras de Pokhara poseen unas cuantas atracciones para los turistas, por lo que suelen ser objeto de visitas de uno o varios días. En el norte de la ciudad, la colina de Sarangkot te permite disfrutar de un panorama increíble de los Annapurna. En la orilla sur del lago, podrás llegar a la pagoda de la paz en tan solo unos pasos y allí podrás disfrutar de unas vistas maravillosas a las afueras. Si quieres practicar trekking, puedes ir al Panchasee, un recorrido muy fácil que te servirá para ponerte a tono. Pokhara es uno de los imprescindibles de un viaje por Nepal.
*Tras los duros seísmos que golpearon a Nepal en abril y mayo de 2015, el país se está reconstruyendo poco a poco. Este artículo se escribió antes de que tuviera lugar la desafortunada catástrofe.
Puede que en parte haya sido el recibimiento que nos dieron en la ciudad lo que me dejó una sensación desagradable. En un viaje al Annapurna, aunque vayamos por la autopista, se pasan largos períodos en soledad o dedicados a la contemplación, la meditación, a observar y escuchar el silencio, a disfrutar... Poco después de llegar a Pokhara, y por primera vez en nuestro viaje por Nepal, debido a razones de seguridad, nos informan que la ciudad será cerrada durante tres días a partir del siguiente día.
Montados en bicicleta, intentamos explorar la zona para descubrir los atractivos de este lejano oasis sin mucho éxito. Nos vimos presionados en la obligación de recorrer el lugar apresuradamente y a contracorriente de los turistas venidos aquí para descansar, o disfrutar del lago situado justo en medio del Himalaya. Pero me marché sin lamentarme demasiado, aún queda fresco en mi memoria el recuerdo de las montañas por las que habíamos hecho el esfuerzo de llegar.
*Traslos fuertes terremotos sufridos en Nepal en abril y mayo de 2015, el país sigue reconstruyéndose poco a poco. Este artículo se ha escrito antes de la catástrofe.