Esta isla, de visita obligada en el oeste de Canadá está muy cerca de la frontera con Estados Unidos y es un buen lugar para seguir tu ruta hacia el sur.
En la capital de la Columbia Británica se vive al ritmo de los ingleses y aún tienen la tradición de tomar el té por la tarde. Si tu presupuesto te lo permite, el Fairmont de Victoria, además de ser un edificio digno de ver de por sí, es el lugar más famoso de la ciudad para vivir de lleno la tradición inglesa. Te aconsejo que te pasees por sus numerosos jardines. Es un auténtico placer y podrás ver a tu ritmo la arquitectura victoriana de la ciudad. Si prefieres salir un poco de la ciudad y descubrir las bellezas naturales de la región, hay un parque que me encantó, el de la Cuenca del Pacífico Es majestuoso. En pocas palabras, es una ruta de senderismo a orillas del Pacífico.
Victoria ofrece la combinación perfecta entre naturaleza y ciudad, y por eso me gustó tanto visitarla.