Un itinerario de una semana permite apreciar las joyas esenciales de Puglia. Comienza dedicando un día a Bari, donde podrás observar a las mujeres elaborando pasta orecchiette en las callejuelas medievales. Dirígete luego hacia Alberobello para maravillarte con sus característicos trulli, reconocidos como patrimonio de la humanidad. Las poblaciones cercanas de Locorotondo y Cisternino merecen una parada por sus centros históricos inmaculados.
La ciudad blanca de Ostuni y Polignano a Mare, con sus acantilados sobre el mar Adriático, representan paradas indispensables. Culmina tu recorrido en Lecce, llamada la "Florencia del sur" por su espléndida arquitectura barroca y su piazza del Duomo. Para optimizar el tiempo, establece tu base de alojamiento en Monopoli o Polignano a Mare, ubicaciones estratégicas para estas excursiones.
Luego se explora la región del Gargano, entre pinares, montañas y encantadoras estaciones balnearias. El itinerario continúa hacia el interior, donde se hace escala en pueblos pintorescos (¡no te pierdas el Pueblo del Amor!) entre dos caminatas. Para un viaje más responsable en Puglia, dirígete luego al valle de Itria. Luego, salida hacia el Salento, al sur de la bota italiana. Se visita la ciudad blanca de Ostuni y se navega a lo largo de la costa de Santa Maria di Leuca. Se termina en Gallipoli, la perla del litoral Pugliano.