Las 7 perlas de Sicilia

Hoy día dedicado a la visita del pequeño centro histórico, podréis descubrir la Acrópolis de Lipari, el Castillo, la Catedral con el Claustro y el Museo Arqueológico que documenta e ilustra, a través de numerosos hallazgos, los asentamientos humanos y el desarrollo de las civilizaciones que se han sucedido en el archipiélago de las Eolias desde la prehistoria hasta los tiempos modernos. Por la tarde, traslado del puerto de Lipari a la bodega de vinos Tenute di Castellaro; visita de la famosa bodega, paseo por los viñedos y degustación de vinos dentro del viñedo mientras se admira la puesta de sol con vistas a las hermosas islas de Alicudi, Filicudi y Salina. Cena libre y alojamiento en hotel.

Después del desayuno en el hotel, el día estará dedicado a descubrir las más bonitas calas de Lipari y la verde Salina. Después de dejar el Castillo de Lipari, Monte Rosa y Canneto, la primera parada se hará en las Canteras de Piedra Pómez para nadar. Luego, antes de llegar a Salina se bordeará la playa de Acquacalda. La primera escala portuaria será en S. Marina di Salina para visitar el municipio más importante de la isla y la espléndida iglesia homónima con su antigua mayólica. También tendrá tiempo para comprar productos típicos de la zona como alcaparras y el vino de postre «Malvasía». Después de costear el lado oriental, se hará otra parada para un segundo baño en la hermosa bahía de Pollara, famosa porque fue elegida por Massimo Troisi para la película «Il Postino». Luego se hará una parada en Lingua, un pequeño pueblo de pescadores donde, además de los restaurantes y las encantadoras calas donde es posible nadar, se podrá visitar el lago salado del que la isla toma el nombre. Se aconseja almorzar en el famoso bar «Alfredo» para degustar el típico «pani cunzatu» y las deliciosas granitas. En el camino de regreso, se visitarán las cuevas más bellas de Lipari y se podrá hacer el último baño en la playa de Vinci, frente a los Faraglioni. Regreso a Lipari por la tarde. Cena libre y alojamiento en hotel.

Hoy, el circuito por las islas Eolias incluye la salida desde Marina Corta hacia Panarea, donde se visitará Cala Zimmari, la bahía natural de Calajunco, donde se encuentra encima el pueblo prehistórico de Capo Milazzese. Se continuará el recorrido panorámico entre los islotes, visitando la Cueva de los Enamorados, hasta llegar al puerto. Una vez llegados a la isla, se visitará la Iglesia de San Pietro, desde donde se podrá disfrutar de una vista panorámica impresionante, hasta continuar hacia el pueblo prehistórico. Alternativamente, se puede almorzar, dar un paseo por los elegantes callejones, darse un baño y disfrutar de una de las deliciosas granitas que se sirven en los numerosos cafés frente al mar. Por la tarde, se embarcará hacia Stromboli, donde se observará desde el mar la pequeña Ginostra y Strombolicchio, una roca gigantesca. Una vez en la isla, se visitará este encantador pueblo, y para aquellos que lo deseen, es posible echar un vistazo dentro de la casa donde se alojó Ingrid Bergman durante el rodaje de la película «Stromboli, tierra de Dios» y donde nació el amor con Rossellini. Tendrá tiempo para cenar, pasear, recorrer las tiendas y los magníficos jardines o darse un chapuzón en las magníficas aguas cobalto. Al atardecer, se regresa para admirar la «Sciara del fuoco» desde el barco. Se trata de una empinada ladera surcada por torrentes de lava, y se podrá presenciar desde el mar el maravilloso espectáculo que brinda este volcán, estallando en una sinfonía de lava. Por la noche, regreso a Lipari, cena libre y alojamiento en hotel.

Durante su estancia en la isla, además de las excursiones propuestas para visitar el archipiélago, se recomienda alquilar una moto y explorar Lipari en libertad. De esta forma, se puede llegar a visitar rincones conocidos y desconocidos, como la famosa Playa Blanca (accesible tanto por mar como por tierra a través de una escalera decorada con mayólicas) que se encuentra a los pies de las canteras de piedra pómez, caracterizada por el magnífico color turquesa del agua, reflejo del fondo marino de grava debido a la extracción pasada de piedra pómez. Hay numerosas calas que habría que ver una tras otra: además de la ya mencionada Spiaggia Bianca, no debe perderse también Pietra Liscia (más pequeña y no equipada) y Porticello. Sin embargo, para los amantes del buceo se aconseja Punta Castagna y la playa Gabbiano, una cala paradisíaca. Si se sigue más al norte, se encontrará la bahía de Acquacalda, una de las más evocadoras de la isla con vista a Salina. Continuando hacia el noroeste, solo se pueden admirar acantilados espectaculares y atardeceres inolvidables, mientras que en la parte suroeste, con vista a los farallones y Vulcano, se encuentran las playas de Valle Muria y Vinci. Ambos son de difícil acceso a pie porque hay que caminar por senderos impermeables, pero la belleza del agua y la vista compensan sobradamente el esfuerzo. Para quien no quiere alejarse del centro de Lipari, más allá del promontorio del Monte Rosa, es posible llegar en pocos minutos a la Playa de Canneto: la bahía más concurrida de la isla, larga unos 2 km, alcanzable en autobús (unos 5 minutos del centro). Cena libre y alojamiento en hotel.

El circuito del fascinante archipiélago de las Eolias continúa con un recorrido por la isla de Vulcano. Se empieza por el Vulcanello, donde la lava ha creado fantásticas figuras dando vida a la pintoresca Valle de los Monstruos. Luego, dejando los Farallones y la Cava de los Ángeles a la derecha, se puede admirar la bahía de Sabbie Nere, famosa por su larga playa de arena volcánica, y el volcán activo de la isla: el imponente Gran Cráter de la Fosa. Luego se continuará hasta la Cava del Caballo, cerca de la cual se encuentra la Piscina de Venus, un espejo natural de agua cristalina. Se bordeará la isla hasta Gelso, un pequeño pueblo casi deshabitado donde se hará una parada para tomar un baño, y luego se llegará a la última escala en el puerto de Levante donde, recibido por el acre olor a azufre, se podrá realizar un recorrido por el pueblo o un baño en la piscina de barro con aguas calientes, o en piscinas geotermales. Para los más deportistas, no se puede perder la subida al cráter: larga aproximadamente 1 km cuesta arriba, ofrece una vista impresionante de las islas y del mismo cráter, opcional y se puede realizar de manera autónoma y sin guía. Regreso a Lipari por la tarde, cena libre y alojamiento en hotel.

Después del desayuno, día libre en la isla. En opción, con suplemento, puede descubrir las dos islas más salvajes del archipiélago: Alicudi y Filicudi. La excursión empieza con la travesía hacia Filicudi para llegar a la Grotta del Bue Marino donde tendrá un baño inolvidable. Luego continuará hacia los farallones: Montenassari, Giafante y sobre todo la Canna, una particular roca columnar de 1.800 metros cuadrados de ancho y 71 metros de altura, que se eleva desde el mar. Una vez en el puerto, se podrá hacer una parada para visitar el pueblo prehistórico de Capo Graziano y el pueblo. Antes de partir, se aconseja visitar «Las muelas de Filicudi», que se encuentran frente al área arqueológica subacuática, y donde los artesanos, facilitados por la estructura estratificada de las rocas, modelaron las enormes piedras para los molinos de trigo y olivo. A primera hora de la tarde se navegará hacia Alicudi, la isla más occidental y menos poblada de todo el archipiélago de las Eolias. De forma casi perfectamente circular, se caracteriza por unas espléndidas vistas al mar, terrazas secas y estrechas calas de granito que son las únicas vías de acceso a las playas. Dentro de la isla no existen carreteras asfaltadas sino caminos que se pueden recorrer en burro, único medio de transporte de la isla. Regreso a Lipari por la tarde. Cena libre y última noche en el hotel de Lipari.

El circuito por las Islas Eolias termina aquí. Desayuno en el hotel y traslado al puerto para coger el hidroala con destino a Milazzo. Traslado privado para el aeropuerto y fin de nuestros servicios.