El enigmático y hermoso país asiático de Sri Lanka tiene mucho que ofrecer a todo tipo de viajeros. Desde sus misteriosos templos hasta sus sitios en lo alto de las montañas, pasando por sus playas, sus plantaciones de té y sus ciudades declaradas patrimonio de la humanidad por la Unesco, el país del "oro verde" garantiza una estancia inolvidable y sorprendente.
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Diez días de viaje en Sri Lanka son un mínimo para descubrir los imprescindibles del país. Ya sea en un roadtrip o explorando una región más secreta, aquí tienes algunas ideas de experiencias para vivir en Sri Lanka:
Sri Lanka es un país pequeño pero con bastante variaciones de tiempo dentro del mismo. Por su clima tropical, las temperaturas son agradables durante todo el año, sin embargo, antes de visitar el país tenemos que tener claro en qué zona estamos interesados, puesto que mientras en el oeste hay temporada seca, en el oeste encontraremos lluvias y viceversa. La mejor época para visitar el suroeste es de diciembre a abril, mientras que el noreste se visita entre los meses de abril a septiembre. Sri Lanka sabrá seducirte con los numerosos tesoros del antiguo reino de Ceilán: entre las ciudades antiguas, las playas paradisíacas y las montañas de postal, el paisaje ceilanés es embriagador.
Desde el sagrado sitio de Mihintale hasta el pequeño pueblo de Haputale, tu estancia en Sri Lanka estará llena de experiencias únicas. Comienza tu ruta de turismo por Sri Lanka descubriendo la capital, Colombo, y luego dirígete a los mercados de pescado de Negombo, a 40 kilómetros de la capital.
Al día siguiente, pasa medio día en la hermosa ciudad fortificada de Galle y admira la técnica de pesca de los pescadores con vara. Luego, dirígete a Sigiriya, una impresionante ciudad en el famoso "lion's rock", haciendo una parada en el templo dorado de Dambulla.
Cerca de Ella, disfruta de la tranquilidad de las montañas y la paz en las plantaciones de té. En Kandy, intenta vislumbrar la pagoda del diente de Buda entre los fieles. Antes de regresar, no te pierdas un espectáculo de danza tradicional. Un viaje cien por cien auténtico, ¡creado junto a tu agencia local experta en Sri Lanka!
Para un roadtrip único en este hermoso país asiático, ¡lo ideal es tomar el tren! El viaje en tren entre Nuwara Eliya y el pequeño pueblo de Ella es imprescindible. Mezclarse con la gente local y escuchar sus charlas y canciones mientras admiras los exuberantes paisajes de Sri Lanka es una experiencia inolvidable. Si conduces, no te pierdas la hermosa ciudad de Galle y la estación balnearia de Negombo, cerca de Colombo, al suroeste de la isla.
Para ver el diente de Buda en Kandy en un día, tendrás que dejar tu vehículo abajo: ¡desde el templo, la vista de la ciudad y el lago es magnífica! Para conducir en el país, necesitarás una autorización temporal. No olvides preguntar a tu agencia local por toda la información para reservar el coche. La conducción es por la izquierda y puede ser caótica en las grandes ciudades como Colombo. ¡Ten cuidado!
La mejor época para visitar Sri Lanka en una ruta de 10 días es de diciembre a marzo, durante la temporada seca. El clima es ideal para pasear por las montañas del suroeste, desde Nuwara Eliya, a 1884 metros de altura, hasta la cima del Pico de Adán, lugar de peregrinación de cuatro religiones diferentes. También es ideal para visitar las ciudades imperiales como Kandy, la ciudad que alberga el famoso diente de Buda.
Y las playas de Sri Lanka se pueden disfrutar durante todo el año. Para unos días de descanso, visita Beach Road en Negombo. La temporada húmeda, de abril a octubre, se caracteriza por numerosas precipitaciones. Dos consejos para todos los viajeros: evita los meses de octubre y noviembre al reservar tu viaje a Sri Lanka, ya que las tormentas son frecuentes. Y también consulta con regularidad la información meteorológica.
La época de lluvias en Sri Lanka varía según la región debido a sus dos monzones. En la zona suroeste, donde se encuentran lugares populares como Galle o el parque nacional de Yala, la temporada de lluvias monzónicas va de mayo a septiembre. En las regiones norte y este del país, el monzón Maha trae lluvias entre octubre y enero.
Sin embargo, incluso durante estos periodos, hay momentos de lluvias moderadas que permiten hacer turismo. Es relevante tener en cuenta que a mediados de octubre, la segunda temporada lluviosa golpea fuertemente la costa noreste con lluvias torrenciales.
Para un viaje a Sri Lanka lleno de descubrimientos y delicias del océano Índico, comienza explorando Colombo antes de visitar el magnífico templo dorado de Dambulla. Al día siguiente, sube las patas del león del famoso "lion's Rock" para llegar a la ciudad de Sigiriya. ¡Unos espectaculares frescos y vistas increíbles te garantizan una experiencia única!
Si te gusta la altitud, no te pierdas el sitio sagrado de Mihintale o el Pico de Adán. En la hermosa ciudad de Kandy, la pagoda del diente de Buda tampoco te dejará indiferente. Después de estos días de exploración, ¡dirígete al océano Índico y a las Maldivas! En Malé, la capital, disfruta de momentos de relax al sol para un merecido descanso. Snorkel, siestas y relajación, ¡la experiencia no tienen precio!
En Sri Lanka, el coste de vida es casi la mitad que en Europa y el poder adquisitivo es casi un 80% más alto. Con la ayuda de tu agencia local, experta en el destino, podrás diseñar un itinerario que se ajuste a tus deseos, desde la visita de lugares imprescindibles como el diente de Buda de Kandy hasta los senderos secretos cerca de Ella o el pequeño pueblo de Haputale. ¡Contacta ya a tu agencia para que te dé toda la información sobre el destino y obtener un presupuesto para tu viaje!
Para un viaje a Sri Lanka, es esencial adaptar tu equipaje a las condiciones climáticas. Como el país tiene un clima tropical, prioriza la ropa ligera y transpirable, como el algodón o el lino, para mayor comodidad.
- No olvides tu bañador para disfrutar de las hermosas playas de la costa este.
- Protección solar: sombrero, gafas de sol y protector solar biodegradable son indispensables para protegerte de los rayos ultravioleta.
- Ropa que cubra: para visitar los templos, lleva ropa larga que cubra los hombros y las rodillas.
- Calzado cómodo: elige zapatos cómodos y adecuados para las diversas actividades, ya sea en la playa o durante las visitas.
- Impermeable ligero: aunque el clima suele ser seco, siempre es posible una lluvia repentina. Un impermeable ligero te será útil.
- Ropa abrigada: si planeas visitar regiones montañosas, un suéter o una chaqueta pueden ser necesarios para las noches más frescas.
- Botiquín de primeros auxilios: por último, lleva un botiquín de primeros auxilios con medicamentos básicos y productos contra los mosquitos.
Adapta tu equipaje según tu itinerario y las actividades previstas durante tu estancia.
